Cuando eso que amas, es precisamente dar amor.

Como dice una canción de los Beatles: “All You Need is Love”! Es muy cierto, amor es el principal alimento. Amor a Dios, amor a uno mismo, amor al prójimo, amor al universo y toda la creación, y por supuesto, Amar lo que Hacemos!
Pasiones las hay de todo tipo, y cuando esas pasiones están conectadas a tu propósito, siempre vienen acompañadas de un don y un talento especial. Es nuestra responsabilidad descubrir cuales son esas pasiones que están enlazadas a nuestro propósito, y alinear nuestras vidas a ellas. No sólo nos brinda la plenitud y la felicidad que todos buscamos, pero desde luego aporta a la humanidad ese hermoso balance mágico donde "cada uno está haciendo lo que ama al servicio de personas que aman lo que uno hace".
Creo que este mundo necesita mucho amor, y es por ello que aplaudo y exhorto a todos aquellos que tienes el don especial de dar amor, a que se pongan en acción, porque desde luego las pasiones contagian, y provocar una epidemia de amor tiene un efecto viral muy sanador.
La semana pasada, se celebró el día internacional de la Paz. Recuerdo hace 3 años, en ese día, cuando mi hijo Nestor regresó del colegio, me dijo: “Mami, hoy durante toda la mañana sentí un fuerte deseo de abrazar a la gente”. Yo de inmediato le pregunté que si le había dado riendas sueltas a su deseo. Luego de hacer una mueca de duda y negación con la boca, me contestó: “Bueno, sólo abracé a Amelié, y la abracé dos veces porque sabía que a ella no le importaba que la abrazara”. Después de felicitarlo por su espontaneidad, le motivé a que cuando sienta esos deseos de manifestar amor, no los reprima. Porque este mundo necesita mucho amor. Luego le recordé que a veces él me dice que ya no debo decirle tan a menudo que lo amo, porque ya él lo sabe de todas las veces que se lo he dicho. Sin embargo, le dije, lamentablemente muchos niños y/o adultos no escuchan muy a menudo de sus seres queridos que “les quieren y que los aprecian”. Y que por eso, recibir un abrazo espontáneo suyo, podría hacerle el día a cualquier persona.
Le reiteré nunca reprimir esos deseos de demostrar afecto, y a hacerlos parte de su vida. Le pedí que observara si esos deseos son muy frecuentes, para que reconozca su llamado de ser un portador especial de afectos; enfatizándole cuan curador es ese don para el resto de las personas que están ávidas de amor y de cariño. "El mundo necesita mucho amor!"
De igual manera me enterneció este video, en el que un anciano de avanzada edad manifiesta su amor con mucha autenticidad y entusiasmo a quien fuera la compañera de su vida, quién en el momento de su muestra de amor se encuentra en su lecho de muerte.