Hace tres días compartí un fregamento pequeño de este video en una de mis historias. La interconexión entre estos animalitos era una abierta invitación a la paz, la tolerancia y al amor, a pesar de las diferencias y los prejuicios. Esa percepción me hizo recordar esta experiencia que viví en Noviembre de 2015 en la ocasión del cumpleaños de mi amiga Maria Crespo. Hoy hace justo 3 años que escribí este artículo mientras me encontraba inmersa en un hermoso viaje con mi madre por el Sureste de Asia.
Mantenerme alineada a mi Pasión # 5, me mantendrá inscrita de por vida en la Universidad de los Viajes por el Mundo; donde espero obtener un Summa Cum Laude en el Diploma de Amor, Diversidad, Tolerancia, Cultura, Aceptación y Gratitud que obtienes al cursar esta maravillosa Carrera de los Viajes.
Viajar no es trasladarse de un lugar a otro usando un medio de locomoción. Viajar es ver y sentir una nueva cultura por dentro y por fuera apreciando y aceptando los valores de cada uno y lo que les hace genuinos. Sólo así podemos convertir la experiencia en una, que nos hace embajadores de la cultura que nos disponemos a conocer, y nos permite interceder a su favor cuando por prejuicios viciados, alguien emite un juicio peyorativo generalizado.
En ese viaje, mientras mi mamá, mi amiga María y yo, recibíamos la oportunidad de ver por dentro la cultura musulmana, en el otro lado del mundo, Paris fue escenario de varios ataques terroristas que de inmediato removieron sentimientos xenofóbicos contra las diferentes comunidades árabes o persas en el mundo. Y aunque los medios de comunicación informaban que terroristas radicales de ISIL reclamaron responsabilidad por estos actos, mi sentir era que no debemos permitir que esta información nos lleve a condicionar nuestras mentes para segregar y odiar. Y sin embargo, mientras esta noticia sacudía y dejaba al mundo perplejo y enojado, nosotras estábamos sobrecogidas con las expresiones de amor que recibíamos de toda una familia musulmana, donde sólo conocía previamente a mi amiga Zaiton, pero donde hasta la señora del servicio se volcó en amor para con nosotros. Al grado de realizar una celebración sorpresa, con almuerzo y pastel incluidos para festejar el cumpleaños de mi amiga María Crespo.
Yo opto por sumergirme en la diversidad y ver la belleza que hay en ella. Opto por no generalizar. Mientras escribía estas palabras todavía llevaba en el bolsillo derecho de mi chaqueta de viaje, la tarjeta de Maysam Mirzakhalili, un hombre con una tremenda aura de paz que conocí en mi travesía, con quien conversé por muy poco tiempo, y no quiero pretender que lo conozco de por vida, pero a quien con el scanner de mi corazón pude observar como ser humano, y acepté con gratitud su invitación de algún día ir a conocer su país… el gran imperio Persa, Irán.
En Malasya nos está esperando Hamid Ullah Shinwari, Pakistaní, otro musulmán encantador, con quien desde el día que nos conocimos quedé conectada vía Whatsapp. Me encantó no sólo su aspecto barbudo con una pulcritud extrema, sino su fascinante sentido del humor, su claro deseo de conectar por medio de su filosofía de vida y su visión global de un mundo sin fronteras. Disfruto cada mensaje que casi a diario recibo de él, siempre con un claro deseo de compartir sabiduría.
Mis hijos ya están apuntados la Universidad de los Viajes por el Mundo, y procuraré que siempre estén sumándoles créditos a su curriculum, porque estoy convencida que mientras más conocemos otras culturas más toleracia y aceptación podemos sembrar en el mundo.
Adoro viajar… y pretendo contagiar con mis experiencias a todo aquel que esté abierto para amar sin mirar a quien ….a abogar por la unión y el respeto, y a tener compasión por los que en su estado inconsciente e irracional, siembran discordia y odio con actos barbáricos como los que hemos tenido que lamentar en muchas ocasiones.
Ahora…llena de gratitud por las hemosos momentos que he vivido en este y otros hermosos viajes que he realizado por el mundo, me concentro en seguir sembrando pasión, para que otros puedan alinear sus vidas a sus pasiones, y lograr de esta manera vivir la vida haciendo lo que aman.